El Día Mundial de la Actividad Física, que se celebra el 6 de abril de cada año [1], es un día especial para educadoras y educadores físico deportivos, porque a nivel global se visibiliza la importancia de la educación física, la actividad física y el deporte, bien sea para la salud, desde la perspectiva de la OMS, bien sea por los valores asociados al deporte para el desarrollo y para la paz, desde la perspectiva de la UNESCO [2].
De alguna manera la situación actual ha revalorizado la práctica físico-deportiva para la salud física y mental, para la prevención de enfermedades (Pedersen y Saltin, 2015 [3]), e incluso para reducir el riesgo de mortalidad por COVID-19 (Brawner y cols., 2020 [4]; Salgado-Aranda y cols., 2021 [5]).
Enlaces
[1] https://www.consejo-colef.es/post/dmaf2018
[2] https://twitter.com/UNESCO_es/status/1379338096878227458?s=20
[3] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26606383/
[4] https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0025619620311307#
[5] https://link.springer.com/article/10.1007%2Fs40121-021-00418-6